La guerra está a punto de terminar, ocho han sido los años que el fuego azotó a la humanidad, de ésta poco queda. El único consuelo de la gente se encuentra en un circo a las afueras del poblado. En ese lugar los culpables son juzgados por quienes, como muchos otros, han sufrido la guerra. Estos excéntricos jueces son los encargados de impartir justicia, no sin antes dar el espectáculo que todo circo merece. Cada espectador es invitado a saciar su venganza, en un lugar donde su voz será escuchada y la decisión que tome cambiará la historia.